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La celebración de la Purísima Concepción de María es la devoción mas grande a la Virgen María en Nicaragua. Familias matagalpinas celebran tradicionalmente esta festividad en un ambiente de fe y amor a la madre de Dios.
Doñas Sandra Icabalceta tiene mas 15 años de celebrar a la concepción de María, a raíz de que su hija Sandra Emilia inicio con esta devoción.
“Yo vengo celebrando la gritería desde 1998, mi hija inicio haciendo la purísima con una virgencita que le regalaron, invitaba a los niños del barrio y hacia un altar en la acera de mi casa y así celebraba la purísima” manifiesta doña Sandra.
Por otra parte, doña Adelina Selva quien tiene cinco décadas de tradición de celebrar la gritería, una devoción heredada de su mamá.
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“El inicio fue un favor que le pidió mi mamá a la virgen por una enfermedad que yo tenía, y cuando ella no pudo me comento que si la hacíamos entre las dos” manifiesta doña Adelina.
Además, agrego “todos los años la realizamos rezada no gritada, porque todos estos 50 años le hemos hecho así.
Tradicionalmente en esta festividad la Iglesia Católica acostumbra a peregrinar con la imagen de la purísima en los diferentes barrios de la ciudad, pero este año no se realizará debido a la crisis de salud que atraviesa el país, como es la pandemia del Covid-19.
La diócesis de Matagalpa ha instado a la feligresía a celebrar esta festividad desde sus hogares, donde no se haga gritada si no entregar paquetes alimenticios a las familias mas necesitadas.
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“Yo he decidido no gritarla, si no darle a la gente mas necesitada paquetes alimenticios, donde aproximadamente le daré a unas 100 personas” considera Sandra Icabalceta
El país celebra a partir de este 7 de diciembre la devoción más grande a la Virgen María: mayormente con una ceremonia privada e íntima en la que la familia y allegados se reúnen en sus casas a rezar y cantar salves.
Redacción: Carlos Andrés Montenegro Martínez