Estados Unidos ha actuado de inmediato a través del Departamento del Tesoro, donde ha aplicado sanciones a diferentes funcionarios del gobierno nicaragüense en respuesta a las violaciones a los derechos humanos y además actos donde se han arrestado a personas opositoras y procesadas bajo Leyes consideradas “punitivas” y además por la negativa a tomar medidas para garantizar elecciones libres y justas.
De acuerdo a la Oficina de Democracia, Derechos Humanos y Trabajo “Estados Unidos y la comunidad internacional han observado con alarma cómo el régimen de Ortega-Murillo ha negado cada vez más a los nicaragüenses sus derechos humanos e ignorado los llamamientos para crear las condiciones para unas elecciones libres y justas”
Estados Unidos anunció al pasado lunes 12 de julio restricciones de visado que afectan a 100 miembros de la Asamblea Nacional (Parlamento) de Nicaragua, así como a fiscales, jueces y otros profesionales del sistema judicial nicaragüense, por su presunto papel en la erosión de la democracia en el país.
Las sanciones implican la revocación de los visados que pudieran tener ya algunos de esos funcionarios y afectan además a «algunos de los familiares» de los funcionarios en cuestión, informó el secretario de Estado, Antony Blinken, en un comunicado.
A ello se suma La Unión Europea impuso sanciones a ocho nicaragüenses, entre ellos a la vicepresidenta Rosario Murillo, por socavar la democracia y violar el Estado de derecho, dijo el bloque en un comunicado, este lunes.
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Las sanciones están dirigidas a políticos y altos funcionarios por su «uso político del sistema judicial y exclusión de candidatos de las elecciones».
De cara a las elecciones generales de noviembre, el Gobierno del presidente Daniel Ortega detuvo a más de dos docenas de personas, incluidos candidatos presidenciales, líderes de la oposición, estudiantes y activistas.
Muchos de los detenidos han sido arrestados y acusados de los supuestas «violaciones de la seguridad nacional», que los grupos de derechos humanos dicen es una clara señal de que Ortega está tratando de aplastar cualquier competencia antes de la próxima elección.
La Unión Europea dijo que las sanciones muestran que el bloque está «listo para usar todos sus instrumentos para apoyar una solución democrática, pacífica y negociada a la crisis política en Nicaragua».
Redacción : Carlos Andrés Montenegro