Un 17 de noviembre del año 2020 los lugareños del Macizo de Peñas Blancas en Matagalpa vivieron uno de los peores episodios de su vida, tras el paso del huracán Iota por Nicaragua, donde un deslave soterró a unas seis familias que vivían en las zonas bajas del Macizo de Peñas Blancas, “a un año de la tragedia, las heridas no han cicatrizado”
“Cada 17 de cada mes hemos estado recordando a ellos (fallecidos en el deslave) y a nosotros lo que nos pasó” expresa Juan Carlos quien es sobreviviente de esta tragedia
“Recordar ese momento es como si yo estuviera viviendo ese momento que pasmos ahí en ese momento del deslave “recuerda doña María Navarrete otra sobreviviente.
De esta manera recuerdan los momentos de angustia que vivieron los sobrevivientes de uno de los peores episodios que ha ocurrido en esta localidad el cual dejo según la información publicada por las autoridades nicaragüenses, unas 12 personas fallecidas y 19 sobrevivientes.
Entre los fallecidos estaba la joven Marta Lorena Hernández de 28 años y sus dos hijos de 7 meses y 8 años, para doña Juana Ramos quien es la madre Hernández a un año de haber perdido a estos seres queridos manifiesta que es imposible que las heridas puedan cicatrizar.
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“Para mi es dura saber que mi hija ya no esta mas conmigo, no quería saber nada de mi hija, había perdido a mi hija y a mis dos nietos, ella me visitaba bastante, nunca esperaba eso” expresa con dolor Doña Juana Ramos.
De acuerdo a Ramos siempre recuerda con melancolía que le expresaba a su hija que quien la sepultaría seria ella, sin embargo, fue todo lo contrario.
“Yo le decía a mi hija quien la que te va echar tierra voy hacer yo, mas bien fui yo la que di tierra”
Los restos de la joven Marta Lorean y sos dos hijos descansan en el cementerio de la comunidad Samulali al este de la ciudad de Matagalpa
Redacción: Carlos Andrés Montenegro Martínez