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Familiares y amistades dan el último adiós a Gerardo de Jesús Gutiérrez, conocido como el “comandante Flaco” quien falleció a causa de 12 impactos de bala en su cuerpo en Trojes, El Paraíso, Honduras, el pasado 6 de diciembre.
Sus restos mortales fueron repatriados a Nicaragua el día sábado, donde fue recibido por un cierto número de personas en el municipio de Santa María de Pantasma del departamento de Jinotega.
Para posteriormente realizar sus honras fúnebres en horas de la mañana de este domingo en la comunidad El Talamanque, del municipio de Pantasma.
Durante el entierro, los asistentes coreaban consignas: “¡Viva Gerardo, Viva Nicaragua libre!”, entre otras.
Para sus familiares a pesar del dolor que ocasiona el asesinato del comandante el flaco es satisfactorio poder sepultar sus restos en su tierra natal “me siento alegre porque lo vamos a enterrar aquí en donde le vivía” manifiesta uno de su hermanos.
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Durante la guerra en los años ochenta «El Flaco» Gutiérrez fue miembro de la Resistencia Nicaragüense, pero a partir de julio de 2013 que su nombre comienza a ser mencionado por la Policía y sobre todo por el Ejército, quienes señalaban a Gerardo y a su hermano Armando Gutiérrez de liderar un grupo delincuencial que se dedica al robo, secuestros y abigeato.
Monseñor Carlos Enrique Herrera, obispo de la Diócesis de Jinotega, considera que con estos hechos se vuelve a repetir la historia de los 80.
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“No abona a la paz porque estamos reviviendo heridas, yendo a los años 80 y creo que no es conveniente caer en ese miedo, esa debilidad, de no construir la paz con todos, ya desde hace años se habían comprometido a terminar con esa violencia”, enfatizó Herrera.
En Honduras aún se investiga el asesinato de “El Flaco”. Hasta el momento no hay detenidos
Para sus familiares el asesinato de Gutiérrez no quedará impune y exigen al gobierno de Nicaragua Justicia.
Redacción: Carlos Andrés Montenegro Martínez
